Nacido en Barcelona en 1975, Alberto Guerrero es historiador del arte y restaurador de pintura de carrera. Ha trabajado durante once años como restaurador de pintura de caballete y mural para importantes colecciones particulares y varias iglesias en España y Oriente Medio. Pintor por vocación, se dedica profesionalmente a la creación desde el año 2009.
Su trabajo como creador parte de un proceso inverso a la restauración: Guerrero superpone capas de materia explorando la relación entre los diferentes estratos de color y las texturas que se generan. Como resultado, busca un todo armónico, que explica como una analogía de la Historia, compuesta por millones de factores y circunstancias que se superponen, relacionan entre sí e influencian para dar lugar a hechos o períodos concretos. Un trabajo que se refiere, también, a la identidad del hombre, compuesta por un compendio de capas de realidad, unas visibles y otras ocultas, que solo superpuestas le hacen quien es.